La picanha, un corte típico de Brasil, se encuentra en la parte exterior de los cuartos traseros, cerca de la cadera. Aunque es ligeramente más seca que el solomillo debido a su menor contenido de grasa infiltrada, resulta exquisita cuando se cocina con sal y un buen aceite de oliva.
Este corte triangular es ideal para barbacoas gracias a su capa de grasa blanca que intensifica el sabor de la carne y la protege durante la cocción. Su jugosidad la convierte en una pieza versátil, perfecta para cocinar en filetes, al horno o como una pieza entera a las brasas.
Con su excelente veteado, la picanha destaca por su suavidad, jugosidad y sabor. Retirada de la tercera vena famosa, asegura que no queden partes duras del muslo en la pieza, haciendo de este corte la estrella de las parrilladas brasileñas.